Esto ocurre porque cuando añadimos sal (soluto no volátil) al agua (disolvente) aumenta la temperatura de ebullición del agua. Por esta razón, el agua empezará a hervir por encima de 100ºC (la temperatura de ebullición del agua pura son 100ºC), y por lo tanto tardará más tiempo en hervir que si no hubiésemos añadido la sal. Ésta es una de las llamadas propiedades coligativas: “el aumento ebulloscópico”.
Conclusión: cuando vayas a cocinar, espera a que el agua esté hirviendo para añadir la sal.
Pues ésta es una posible pregunta de Fisicoquímica del examen FIR, y ¡ya te la sabes! En la academia FIRway trabajamos y nos esforzamos por hacer fácil lo difícil.